Uno de los momentos más cruciales del proceso de recepción es la inspección visual de los productos recibidos. Además, durante esta inspección, llevamos a cabo un detallado registro fotográfico que documenta el estado en que llegan dichos productos.
Este registro no solo incluye los posibles daños o problemas en el empaquetado, sino que también recoge los datos más relevantes para asegurar y fundamentar una correcta y efectiva trazabilidad, como el número de lote, fecha de caducidad, lugar de origen de los productos, etc.
Además de contar con un equipo capacitado en Buenas Prácticas de Distribución (BPDs), todo el personal de almacén recibimos formación periódica en Farmacovigilancia. Esta capacitación no solo nos proporciona la habilidad técnica necesaria, sino que también refuerza nuestro compromiso, para identificar y bloquear cualquier producto que presente algún tipo de duda sobre su estado.
Este enfoque es esencial en un área de negocio donde la seguridad y calidad de los productos farmacéuticos es un requisito básico. Estamos comprometidos con mantener los más altos estándares en cada paso del proceso logístico, con el fin de asegurar la satisfacción y seguridad de nuestros clientes.
